Así como en la escena teatral o en una película actúan los actores que representan los diferentes personajes, en la “escenario” político de cada país aparecen los actores que se ocupan a asumir sus respectivos roles políticos. Aunque, en el sentido amplio, todos los ciudadanos cumplen con dichos roles, en las sociedades modernas y en el sentido más restringido, son las organizaciones politicas las que se encargan de protagonizar la vida política de una sociedad.

viernes, 9 de abril de 2010

Nuevos Actores y Organizaciones Políticas. Perspectiva Democrática

Mucho se ha escrito sobre la situación política y social por la que atraviesa
Venezuela en el presente. Sobre sus causas, dimensiones y perspectivas abundan los enfoques y posiciones ideológicas. Hoy resulta difícil, y es ya un lugar común aludir a esta dificultad dentro de los variados círculos de analistas que tienen vida en el país, entender y explicar toda la complejidad nacional. En Venezuela los hechos se presentan como un aluvión que suele empañar cualquier intento explicativo que se presuma de objetivo. Aquí abundan las medio-verdades. Sobre esto último debe partir cualquier análisis, pues de este modo, estaremos advirtiendo que nos asumimos como integrantes de este tiempo paradojal, en donde no existe una sola perspectiva analítica que de cuenta de nuestra heterogénea realidad. En Venezuela se han producido hechos inéditos, acompañados del dislocamiento de los roles naturales de todos sus actores sociales, políticos, económicos, eclesiásticos y militares. Todo esto dentro de una tensa confrontación y polarización política.

Los últimos cinco años han tenido como actor principal a la diatriba política. La confrontación, más que el debate doctrinario, ha inundado hasta nuestra vida privada. Familias fracturadas, amistades rotas, improperios y epítetos sahirientes es parte de nuestro actual rostro como sociedad. Ni siquiera el béisbol, nuestro pasatiempo nacional y mucho menos la incursión internacional de nuestra selección de fútbol - la Vinotinto-, nos apartan de la acidez en la cual han devenido nuestras relaciones humanas. En esta cargada atmósfera social, donde el consenso es un gran ausente, tienen que lidiar sindicatos, políticos, Estado, organizaciones de toda índole y el ciudadano común. Es en esta tupida red en donde la sociedad venezolana busca sobrevivir, y en donde los trabajadores y sus organizaciones intentan defender sus respectivos patrimonios y campos de acción. Pero a su vez, tanto a trabajadores, sindicatos, organizaciones políticas así como al Estado en su conjunto, les han aparecido unos contrincantes que por momentos les han allanado sus respectivas madrigueras. Nuevos actores sociales, organizaciones no gubernamentales, bajo el genérico de “sociedad civil”; han hecho acto de presencia en la escena política, emplazando y confrontando a liderazgos tradicionales y asumiendo circunstancialmente, la dirección de diversas acciones contestatarias contra el conocido sistema establecido, pero también en la defensa de éste. Por ello tenemos a actores pro-sistema y opositores al mismo.

No ha existido en los últimos años un solo acontecimiento, dentro del marco de la ya conocida confrontación política del país, en donde el protagonismo de estos actores no haya estado presente. Veamos algunos de los rasgos más sobresalientes de estos nuevos actores sociales de la coyuntura nacional venezolana del presente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario